CONSUELO DE PABLO PORQUE ESTABAN FIRMES EN LA FE (1 Tesalonicenses 2:17-20) | Luis Falquez
En la semana anterior se explicó la porción del 2:14-16 donde Pablo les explica la triste verdad de que los incrédulos, sean judíos o gentiles, están opuestos a la verdad de Dios.
Él explica esto ampliamente en Romanos 9-11, donde muestra que los judíos, el pueblo de Dios del Antiguo Testamento, han caído por un tiempo en la incredulidad, hasta que en un tiempo futuro retire el velo de sus corazones (2 cor 3:15-16), y el pueblo judío sea nuevamente injertado en la iglesia (Ro 11:23-27).
En los siguientes cuatro versículos, el apóstol explica la razón de no haber vuelto a Tesalónica. Quizá sus mezquinos detractores le acusaban de cobardía por no volver a causa de la oposición que se había encontrado allí.
Pero nosotros, hermanos, separados de vosotros por un poco de tiempo, de vista pero no de corazón, tanto más procuramos con mucho deseo ver vuestro rostro; por lo cual quisimos ir a vosotros, yo Pablo ciertamente una y otra vez; pero Satanás nos estorbó. Porque ¿cuál es nuestra esperanza, o gozo, o corona de que me gloríe? ¿No lo sois vosotros, delante de nuestro Señor Jesucristo, en su venida? Vosotros sois nuestra gloria y gozo.
(1Ts 2:17-20)