EL CONTENTAMIENTO DEL CREYENTE (1 Timoteo 6:6-10) | Pastor Carlos Goya
La vida de piedad, que teme a Dios y le adora, acompañada de satisfacción con lo que en la Providencia de Dios se le trae, representa gran ganancia para la persona. Los cristianos deben ser personas satisfechas y suficientes, sin sentir la necesidad de buscar más de lo que Dios ya les ha dado. Como «extranjeros y peregrinos» en este mundo, los cristianos genuinos están contentos con comida y ropa; todo lo demás es vanidad.