INCAPACIDAD DE LA JUSTIFICACIÓN MORAL (Romanos 2:1-11) | Pastor Carlos Goya
En los mensajes previos se trató la cuestión de la culpabilidad de la humanidad caída que rechaza a su creador, no retribuyéndole gloria y cambiando la verdad de la existencia de Dios por la mentira de necios razonamientos humanos.
Rindiendo culto a las criaturas antes que al creador y siendo entregados o abandonados a una mente reprobada para deshonrar sus cuerpos en actos perversos e inmorales hombres con hombres y mujeres con mujeres y llenos y atestados de toda clase de pecados que los hacen dignos de muerte.
Toda la humanidad caída se encuentra en esta condición radical de culpabilidad, porque aman las tinieblas y no quieren venir a la luz para sus obras sean reprendidas por Dios.
A pesar de esta condición caída y corrupta, los hombres fueron creados a imagen de Dios, Gn 1:27: “?Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó”, por lo que pueden discernir.
Los hombres aunque pueden discernir entre el bien y el mal, por la caída no pueden hacer el bien, sino solamente el mal, Gn 6:5: “Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal.”
Esto demuestra que conocen la diferencia entre lo recto y lo malo. Así, El hombre caído ve faltas en otros más rápidamente que en sí mismo. Las cosas ofensivas y repulsivas en las vidas de otros parecen bien respetables en su propia vida. Si sabe que está mal que otra persona le quite a otro su mujer, entonces sabe que está mal para él quitarle la mujer a otro. Es decir, Si alguien tiene conocimiento suficiente para juzgar a otros, se condena a sí mismo porque muestra que tiene el conocimiento para evaluar su propia condición.
Por ello, cuando alguien comete los mismos pecados que condena en otros, se queda sin excusa ante Dios y su propia justicia es incapaz de salvarlo.
El título de este sermón: INCAPACIDAD DE LA JUSTIFICACIÓN MORAL
Estudiaremos estos pasajes en dos encabezados:
- EL MORALISMO QUE ESTA CONDENADO A SI MISMO (1-4)
- EL MORALISMO QUE ESTA CONDENADO POR SUS OBRAS (5-11)
Nuestro texto de estudio de Romanos 2:1-11:
Por lo cual eres inexcusable, oh hombre, quienquiera que seas tú que juzgas; pues en lo que juzgas a otro, te condenas a ti mismo; porque tú que juzgas haces lo mismo. Mas sabemos que el juicio de Dios contra los que practican tales cosas es según verdad. ¿Y piensas esto, oh hombre, tú que juzgas a los que tal hacen, y haces lo mismo, que tú escaparás del juicio de Dios? ¿O menosprecias las riquezas de su benignidad, paciencia y longanimidad, ignorando que su benignidad te guía al arrepentimiento? Pero por tu dureza y por tu corazón no arrepentido, atesoras para ti mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios, el cual pagará a cada uno conforme a sus obras: vida eterna a los que, perseverando en bien hacer, buscan gloria y honra e inmortalidad, pero ira y enojo a los que son contenciosos y no obedecen a la verdad, sino que obedecen a la injusticia; tribulación y angustia sobre todo ser humano que hace lo malo, el judío primeramente y también el griego, pero gloria y honra y paz a todo el que hace lo bueno, al judío primeramente y también al griego; porque no hay acepción de personas para con Dios.