
LAS DOCTRINAS DE LA SALVACIÓN (Tito 3:4-8) | Pastor Carlos Goya
En otro tiempo estábamos en total depravación y Dios no llamó manifestando su bondad en la obra de Cristo. Nos salvó por su misericordia, otorgándonos una nueva creación y puso su Espíritu en nosotros, el cual derramó abundantemente por Jesucristo. Nos justificó, nos adoptó como sus hijos y nos otorgó la vida eterna en la cual debemos perseverar.
Esta es una palabra fiel que debe ser considerada cada día de nuestras vidas, procurándonos ocuparnos en las buenas obras que Dios preparó para que anduviésemos en ellas.