UNA ADMINISTRACIÓN DILIGENTE (1 Timoteo 5:7) | Pastor Carlos Goya
Según estos versículos, la iglesia debe honrar a las viudas que en verdad lo son. Honrar no conlleva aquí sólo la idea de respeto, sino que incluye también el pensamiento de ayuda financiera.
No todas las viudas eran motivo de carga responsable para la iglesia, sino solamente «las que en verdad lo eran». Lo que me dice que el principio señalado aquí es un principio de administración diligente, donde la iglesia debe tomarse el tiempo necesario para evaluar la situación real de estos creyentes.