LA PALABRA DE LA CRUZ SOBRE TODA PERSPECTIVA HUMANA (1 Corintios 1:18-25) | Carlos Preciado
En la sección pasada Pablo del verso 10 al 17 viene corrigiendo el problema de divisiones que se habían presentado en la Iglesia de Corintios.
Esto era efecto de un falso concepto de lealtad a ciertos líderes, es decir un tipo de afinidad a uno de ellos, ahora la causa de división no era promovida por estos líderes como buscando o pidiendo que los sigan, sino que estos hermanos de Corintios habían seguido con la idea de la cultura Griega, en la cual existían un sinnúmero de escuelas filosóficas y cada individuo se apegaba a la que mas les parecía impresionante, esa actitud pecaminosa habían introducido a la iglesia de Cristo el cual es la cabeza, es por eso que el Apóstol les dice en el V.13 ¿Acaso está dividido Cristo?
Es ahí donde en la parte final del verso 17 les dice a los de Corinto que «Él no vino a predicar el evangelio con sabiduría de palabras», es decir con una impecable retórica para impresionar a alguien como les gustaba a los griegos, ya que él no buscaba impresionar, ni manipular a su audiencia, mas bien lo hizo con un lenguaje sencillo, él quería presentar el verdadero sentido de la Cruz de Cristo, el evangelio, con esto nos empatamos al verso 18 donde hará un contraste entre la sabiduría humana y la palabra de la Cruz.
Nuestro texto de estudio es primera a los Corintios 1:18-25
Porque la palabra de la cruz es locura a los que se pierden; pero a los que se salvan, esto es, a nosotros, es poder de Dios. Pues está escrito:
Destruiré la sabiduría de los sabios, Y desecharé el entendimiento de los entendidos. ¿Dónde está el sabio? ¿Dónde está el escriba? ¿Dónde está el disputador de este siglo? ¿No ha enloquecido Dios la sabiduría del mundo? Pues ya que en la sabiduría de Dios, el mundo no conoció a Dios mediante la sabiduría, agradó a Dios salvar a los creyentes por la locura de la predicación. Porque los judíos piden señales, y los griegos buscan sabiduría; pero nosotros predicamos a Cristo crucificado, para los judíos ciertamente tropezadero, y para los gentiles locura; mas para los llamados, así judíos como griegos, Cristo poder de Dios, y sabiduría de Dios. Porque lo insensato de Dios es más sabio que los hombres, y lo débil de Dios es más fuerte que los hombres.