La salvación es una obra soberana de Dios y, al mismo tiempo, una experiencia real en la vida del pecador. La Biblia enseña que la salvación no ocurre al azar ni depende de la voluntad humana, sino que sigue un orden divino que garantiza que todo lo que Dios comienza lo lleva a término.
La vida cristiana se expresa en adoración. Pero no cualquier adoración, sino aquella que Dios ha revelado en Su Palabra.
Muchos cristianos sinceros se preguntan si realmente es necesario ser miembro de una iglesia. Algunos dicen: «Mientras ame a Dios, no necesito pertenecer a ninguna iglesia». Pero, ¿qué dice la Biblia?
La respuesta a esta pregunta, desde una perspectiva bíblica y reformada, se fundamenta en el principio de sola Scriptura, es decir, que la única norma infalible para la fe y la práctica es la Palabra de Dios.
Dios conoció a los suyos antes de que ellos lo conocieran a Él. Esta verdad, profundamente revelada en la Escritura, no solo exalta la gracia soberana de Dios, sino que ofrece una seguridad firme a todo verdadero creyente.
La separación no es una actitud orgullosa ni una medida arbitraria, sino una obediencia necesaria cuando está en juego la fidelidad al evangelio y la pureza de la iglesia. En este artículo, exploraremos los niveles de separación que la Escritura demanda, y cómo aplicarlos con humildad y fidelidad.
En un mundo donde la verdad de Dios es constantemente ignorada o distorsionada, la iglesia tiene la responsabilidad urgente de enseñar fielmente el evangelio, incluso —y especialmente— a los más pequeños.
Uno de los temas que más ha llamado la atención de estudiosos y creyentes a lo largo de los siglos es el día exacto de la muerte de nuestro Señor Jesucristo. ¿Fue un miércoles, jueves o viernes? ¿Cómo se cumplió lo que Él mismo anunció: “que resucitaría al tercer día”?
La Biblia presenta la historia de la humanidad desde su creación hasta la formación del pueblo de Israel como una nación. En sus primeros libros, especialmente desde Génesis hasta Jueces, se narra un período de aproximadamente 3000 años.
La Palabra de Dios nos enseña que el matrimonio es una institución sagrada establecida por Él desde la creación (Génesis 2:24). Sin embargo, debido al pecado, los matrimonios enfrentan muchas dificultades. La Biblia nos da luz sobre las razones de estos problemas y la solución en Cristo.
Estudiar los libros del Antiguo Testamento en orden cronológico en lugar de su orden canónico tiene varias ventajas, especialmente cuando se trata de entender el plan de redención de Dios en la historia.
En muchas congregaciones, el discipulado ha sido relegado a un programa opcional o a una actividad secundaria. Sin embargo, la Escritura enseña que es un mandato indispensable para la vida y la salud espiritual de la iglesia. Efesios 4:12-13 nos presenta el propósito por el cual Cristo dio ministros a su iglesia: “a fin de […]
Jesús enseña que hay responsabilidades tanto hacia el gobierno como hacia Dios. La iglesia aprende que debe obedecer las autoridades civiles sin comprometer su lealtad a Dios. Mateo 22:21 dice: «Dad, pues, a César lo que es de César, y a Dios lo que es de Dios» (RV60).
El culto familiar es un medio por el cual se asegura que cada generación conozca al Señor, inculcando en los hijos un amor por Su Palabra y la práctica de la adoración. El culto familiar es una práctica fundamentada en principios bíblicos que destacan la importancia de instruir a la familia en los caminos del […]
En los evangelios, se encuentran varios pasajes donde Jesús se identifica como Dios en términos que hacen eco de la revelación de Jehová en el Antiguo Testamento. Estos pasajes muestran que Jesús asumió títulos, atributos y obras que pertenecen únicamente a Dios, indicando su identidad como Jehová encarnado.
La forma como trata un esposo creyente a su esposa es totalmente diferente a la forma como un esposo incrédulo lo hace.
El ayuno en la Biblia no es solo un ejercicio ritual, sino una expresión de arrepentimiento, búsqueda de la voluntad de Dios, dependencia espiritual y justicia.
Jesús no vino para abolir o desechar la Ley dada por Dios en el Antiguo Testamento (Mateo 5:17). En lugar de eso, afirmó su validez y permanencia. La Ley reflejaba el carácter santo de Dios y establecía las normas de justicia y conducta para su pueblo. Jesús subraya que la Ley no es algo que […]
La existencia del infierno está presente tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento como un lugar de tormento.
Las diferentes prácticas en cuanto a la participación en la Cena del Señor reflejan diversas interpretaciones y enfoques respecto a la comunión y la membresía en la iglesia. Así tenemos por los menos tres prácticas diferentes de esta ordenanza: